que los haya interiorizado y que
construya en su ADN social la convicción de que los derechos humanos son la utopía realista que debemos tener como planteamiento central.”
En su participación Marta Lamas apuntó que un elemento importante de los derechos humanos es reconocer el valor de la equidad. “Los derechos
sexuales y reproductivos forman parte de los derechos humanos, y hoy actos vitales de los seres humanos como enamorarse, tener relaciones
sexuales o decidir tener o no tener hijos no encuentran respaldo legal ni servicios públicos adecuados, lo que violenta la conciencia de
muchas personas, sus derechos y en algunos casos su integridad física”. Además, aseguró que la obligación del estado es garantizar la
libertad de decisión de los individuos y su acceso a los servicios que correspondan.
En su turno, José del Val abordó el tema los derechos humanos de los pueblos indígenas en torno a la educación, y señaló que en México
el acceso a la educación es un indicador constante de las desigualdades en el país; así como, que la brecha educativa se amplía y denota
un acceso desigual en oportunidades económicas, políticas, y culturales. Solo 1.6% de la población indígena de entre 20 y 24 años ha tenido
acceso a la educación superior, apuntó.
Recordó también que en México hay 25 millones 699 mil personas que se auto adscriben como indígenas mexicanos y constituyen el 21% de la
población nacional, por lo tanto ese porcentaje debería ser el mínimo de personas indígenas que ingresen a las estructuras educativas.
El etnólogo aseguró que “históricamente el saber ha tenido un carácter colonial, pues la matriz cultural europea organizó la producción
y reproducción del conocimiento de acuerdo a un modelo único de percibir y explicar al mundo.” De igual forma al referirse a las instituciones
afirmó que, “el modelo de estado nacional, homogéneo y hegemónico pasa por una severa crisis de viabilidad y credibilidad institucional,
donde ha vulnerado sus propias capacidades y sus funciones más elementales”. Además, señaló que las reformas institucionales no auguran
cambios sustantivos, por el contrario, las propuestas de reformas al estado pueden implicar la vulneración definitiva de los derechos de
los pueblos indígenas hasta lograr su extinción como culturas y cometer explícitamente un genocidio. Por lo tanto, el modelo educativo del
estado en México se encuentra lejos de interiorizar el valor de los derechos humanos como la base para la construcción de un país que tome
en cuenta, su diversidad y la voz de todos los que buscan el legítimo reconocimiento a su dignidad.
Usted puede obtener más información de los foros universitarios La UNAM y los Desafíos de la Nación visita la página:
www.nacionmulticultural.unam.mx